En mi entorno cercano tengo quien me hará cenar con abrigo y manta para dejar abierta la ventana en mitad del invierno y quien piensa que ya el solo hecho de ponerse la mascarilla es poco menos que claudicar servilmente ante “el actual régimen totalitario”… Tengo por un lado a más papistas que el Papa y a otros más libertarios que Bakunin y Kropotkin juntos. Les quiero por igual a unos y a otros. Sólo desearía que en algún lugar se encontraran.
A menudo no es tanto lo que pensemos sobre un tema, sino la posibilidad de abrirnos al otro/a que abriga también sus sólidos y distintos argumentos. A menudo más importante que nuestros propios postulados es nuestra voluntad de encontrarnos con el diferente, incluso con el contrario siempre y cuando no abandere un desatino contrario a valores universales y Ley divina. En algún lugar tendremos que encontrarnos los vacunas y los antivacunas, los mascarillas y los antimascarillas, los de la hecatombe y los de “aquí no ha pasado nada”…, en algún momento habrá que dejar nuestras distantes montañas y bajar al valle verde, ancho y plural; en algún lugar habrá que trazar un punto de encuentro entre los extremos. Ese lugar no puede ser otro que el del centro sensato, comprensivo y ponderado.
En mi entorno observo posturas muy distanciadas ante la crisis que estamos viviendo y sin embargo todas llevan su mayor o menor parte de razón. Si en algo sí se equivocan es en cerrarse en banda al contrario. Toda esta complicada situación es una clara invitación a hacer valer el punto de en medio, de la mesura, por supuesto del respeto. ¿En qué consiste si no la convivencia humana con la que hemos de sentirnos comprometidos, sino en la recuperación de la exquisita consideración por el diferente?
Ya he abundado en este argumento y pido disculpas si me repito. Cada día estoy más convencido de que el COVID ha venido principalmente a invitarnos, por un lado a abrazar pautas de vida natural, a volver a la armonía con la Madre Naturaleza y por otro lado a retornar a la armonía y sana convivencia para con nuestros congéneres, sobre todo para con quienes no comulgan con mis argumentos.
“…incluso con el contrario siempre y cuando no abandere un desatino contrario a valores universales y Ley divina.” Acaso ese desatino no está siendo abanderado? Existe una REALIDAD que nos exige posicionamiento, es la dualidad en la que se ha basado el viejo paradigma y es muy posible que esta vez se muestre para que en la transmutación surja la UNIDAD. Esta Realidad muestra por un lado un llamado al MIEDO, A LA SEPARACIÓN, A LA COACCIÓN, AL CONDUCTISMO, AL SOMETIMIENTO… aderezado con todo tipo de técnicas y artimañas, y con perversos fines posicionados justo en el extremo opuesto de la JUSTICIA y el AMOR (así lo percibo). ¿Donde puede haber aquí un punto de encuentro? O estás en el Amor o en el Miedo. Acaso el FUEGO puede acercarse al AGUA? Hay encuentro entre estos Elementos?
Puedo reconocer que esto ha venido para bien, que incluso los que provocan esta distopía están actuando para el mismo plan divino, que son parte necesaria en el despertar humano… en la transmutación, pero si esto es así cada uno de nosotros también está actuando y su sentir, lo que le dicta el Corazón, debe ser respetado, pues si gozamos de Libre Albedrío quizás sea para seguir al Corazón y completar así el Divino Plan. Si sientes que el acercamiento es tu postura, adelante, sigue los designios de tu corazón… igualmente si sientes miedo/terror por la enfermedad ponte todas las mascarillas del mundo, vacunaté … quizás ese sea tu papel en esta obra de teatro. Pero no impongamos conductas a los demás, precisamente porque como alude el autor, todos albergan parte de la verdad… y yo siento que más allá de la verdad, más allá de la mente (que insiste en una actuación determinada) hemos de abrirnos a algo mayor, al MISTERIO… que es indescifrable y… DEJAR SER. Eso para mi es el RESPETO, no solo a las posturas, si no a la Inteligencia Superior que nos gobierna. Respiremos y Centrémonos en nuestro Corazón, el sabe el Camino y en él nos encontraremos… o no. Feliz ViDa! Feliz MisTeRiO!
El fuego y el agua cuando se unen en equilibrio se elevan hacia el cielo…. El fuego transforma el agua y lo asciende en forma de vapor❤️
Os quiero a los dos … envidio lo bien que expresais vuestro sentir , y cada vez mas me doy cuenta que ,como dice Xema , actuar desde ” el sentir” me permite unas veces llevar mascarilla y otras no , pensar en como afecta mi posicion al otro y a mi , por tanto cada vez menos , me siento radical en defender posturas inamovibles , porque no lo son, las adapto a mi SENTIR .
Eso me esta enseñando mucho acerca de mi , de mi antigua vehemencia y radicalidad .
Sin embargo , si que hay acciones que no puedo defender, por lo que encubren , enferman , manipulan y vulneran los derechos de las personas ……. Koldo es todo un reto encontrar ese punto de encuentro …. seguiremos en ello . Un abrazo ❤️❤️