Mientras los hombres estén insatisfechos con el mundo que Dios ha creado, estén ocupados cambiándolo de acuerdo con sus propios entendimientos, formarán niebla en su conciencia y en sus pensamientos. Un mundo mejor que el único Dios creado no puede existir. Así que acéptalo tal como es, y sé satisfecho, y da gracias por ser capaz de trabajar y aprender. La gente es experta en peleas y escándalos, pero para crear algo grande o bueno, no sabe, no puede. A pesar de todo, si lo Divino toma la supremacía en ellos, tienen la oportunidad de lograr grandes cosas bajo su guía y de cumplir los nobles y altos deseos de sus almas.
En la palabra “escándalo”, la sílaba “sca” significa insuficiente, pobremente; la sílaba “dal” significa que doy. Los escándalos ocurren cuando el hombre no da lo suficiente. En general, las manifestaciones negativas crean desacuerdos que son difíciles de de corregir. El mal hablar es fácil de decir, pero sus efectos nocivos no son fáciles de borrar.
El hombre solo es bueno, pero si no tiene conciencia, puede profanarse fácilmente. Entonces su alma sufre y se siente descontento y esequilibrado.
En las Escrituras se dice: “El amor nunca decae.” Para no perder su Amor, el hombre debe reconocer y apreciar los bienes con los que Dios lo llena constantemente. También debe aprender a ver en todo lo que está pasando en él y a su alrededor como una gran escuela experimental que requiere aprendizaje continuo: si conoce a alguien que no lo ama, que se pregunta si lo ama lo suficiente; si se encuentra con un ser que le parece desagradable o desagradable, que mire dentro de sí mismo, si no tiene los mismos defectos. El hombre que aprende sobre el comportamiento de los demás, sin “juzgar” ni en el pensamiento ni en la palbra, conserva su armonía interior, condición necesaria para su progreso en el camino de la Nueva Vida.
No juzgues, sino busca la causa del mal en el hombre. ¿Puede perder permanentemente los bienes que Dios le ha dado? No, porque él también se corregirá a sí mismo; su conciencia superior lo iluminará. ¿Quién puede evitar que se beneficie de la luz y de la calor del sol? Nadie fuera de sí mismo. Si el hombre está dispuesto a vivir razonablemente, puede liberarse fácilmente de las dificultades y el sufrimiento.
Beinsa Douno.