Algunas personas quieren oponerse a las nuevas ideas. Yo les digo: cuándo la Enseñanza Divina sea aplicada en todas partes, aparecerá un fuego con una temperatura de 35 millones de grados centígrados. Este es el último plan que Dios ha dado y que yo he traído del Mundo superior.
Una vez un hermano preguntó: “Maestro, ¿por qué estuvo usted prisionero durante 1911?”
E1 Maestro dijo:
Hace más de 30 años yo dije que habría una guerra en 1914 y que Alemania la perdería. Mas tarde, yo aconseje al gobierno para que ellos firmaran un tratado de paz tan pronto como fuera posible, pero en lugar de hacerlo, me pusieron en prisión. Yo también les dije que una Segunda Guerra Mundial vendría, e incluso que ciudades serian destruidas. Yo fui citado al departamento de seguridad de la policía y yo les dije que si hubiera querido yo podía no haberme presentado, pero que yo respeto las leyes y por eso me presenté. Si siguen en el curso presente no quedará nada de Sofia. Ustedes violan las Leyes de Dios, y verán que yo no hablo por mí mismo. Y si yo digo la verdad, ustedes soportarán las consecuencias. Algo terrible se avecina para los búlgaros.
A Bulgaria le sucederá lo que ocurrió a un cierto sacerdote. Él viajaba en una carreta tirada por caballos cuando estos se asustaron. La carreta se volteó y el sacerdote cayó al suelo. Como el suelo era blando el no sufrió lastimaduras. Cerca había una piedra. Si su cabeza hubiera golpeado la piedra, él hubiera muerto. Lo mismo ocurrirá con Bulgaria. Bulgaria atravesará tiempos difíciles, pero tal como con el sacerdote, la nación caerá sobre terreno blando y saldrá relativamente fácil de las adversidades.
Hay una gran catástrofe a la espera de Bulgaria. El país hubiera sufrido grandes adversidades si yo no hubiera podido ayudarlo hasta ahora. Si las gentes de Bulgaria me hubieran escuchado, si hubieran es cuchado a lo Divino, Bulgaria no hubiera sufrido ninguna adversidad. Yo tomé sobre mí mismo nueve decimos de las pruebas destinadas a los búlgaros. Sólo queda un décimo para ellos. Por eso los búlgaros pasarán más fácilmente. Solo Dios tiene el derecho sobre el décimo que permaneced de las pruebas para los búlgaros. Esto no puede ser reducido más.
Un hermano preguntó: “Maestro, el año pasado usted camino hasta el monte Vitosha todos los días independientemente del clima ¿por qué subió a la montaña con tal consistencia?”
El Maestro respondió:
A fin de construir caminos y puentes para que la Justicia Divina pueda venir al mundo. De este modo estoy construyendo el Nuevo Camino, nuestro Camino hacia Dios.
Beinsa Douno.