Los grandes seres avanzados se esfuerzan por hacer que los habitantes de la tierra sean razonables para que puedan disfrutar de los bienes que se les ofrecen. Existen las mejores condiciones para que los hombres vivan en armonía y alegría, pero aún no han entendido las reglas que les permitirían llevar una existencia correcta. ¿Quieres arreglar tu vida? Pero ya está arreglada sin que tú lo sepas. Podemos decir que tu Padre te ha dejado un gran legado, pero, por ignorancia y negligencia, vives como un desgraciado. Dios te ha asegurado, él ha respondido por ti, y en la tierra sólo tienes que estudiar.
Hay una vida que aún no está diferenciada, elaborada. Por lo tanto, los grandes espíritus descienden aquí en la tierra para comprender y trabajar en la vida divina primitiva. Un gran número de almas deben ser encarnadas, y los seres avanzados deben descender a la materia también. Lo hacen con alegría sagrada, con amor, según la ley de la libertad. Es una de las cosas más agradables el ser enviado por Dios a trabajar. Las almas no descienden solas, sino colectivamente.
El hombre debe tener una fuerte protección para sostenerse en la tierra. La Escritura dice: «El Señor caminará delante de ti y él será tu salvaguardia.» Si no tuviera recursos, la vida humana sería del tamaño de un pelo. Sin la protección materna de la naturaleza razonable, el hombre estaría expuesto a miles de peligros todos los días. ¡Si el hombre supiera cuántas veces fue salvado!
La fe es necesaria. Se desarrolla, se fortalece a través de pruebas. Por donde tú camines, serás dirigido. Dondequiera que estés, estás rodeado de seres razonables que te guían y protegen.
Debes saber que no hay fuerza en el mundo que pueda desviar al hombre del camino que Dios le ha asignado: el camino del bien. Esto es lo que es hermoso, lo que es grande y consolador en el mundo. Todo lo que amas te será dado, y lo que no te gusta, te será impuesto a ti primero y luego lo que amas se te ofrecerá; no hay excepción a eso. Lo que el hombre desee, algún día lo obtendra, pero si esta cosa no es razonable, sufrirá. Todo está en su lugar para el ser inteligente, pero para el que es estúpido, nada está en su lugar. En la tierra, todo es una lección de las cosas y, como tal, todo está en su lugar.
La fe y la esperanza son las alas del amor.
A través de la esperanza, estamos unidos al mundo espiritual.
El amor nos une con el mundo divino.
Beinsa Douno.